Superar a tu competencia y ser más eficiente y eficaz para conseguir conversiones puede lograrse mediante la optimización web.
Muchas personas entienden la optimización web como la optimización SEO o “Search Engine Optimization”, que, si bien están relacionados, es un concepto bastante reducido en el alcance de lo que puede significar la optimización de un sitio web.
Evidentemente, si vemos a nuestra página web como un elemento más en nuestra estrategia para conseguir resultados de negocio, entonces podemos desglosar el proceso de generación de resultados y su interacción con la página web.
Empecemos por lo más básico. Todo sitio web, desde su creación, parte de la idea de poder satisfacer las necesidades de una audiencia o usuarios específicos, es así que desde el diseño de la página tenemos que considerar que el nivel de conexión que tiene la misma con el usuario, en la medida de que sea el ideal, podrá generar mejores resultados una vez lanzada la web.
Es aquí donde iniciamos con el primer paso de la optimización digital. La optimización de experiencia de usuario y la interfaz adecuada para el mismo. Uno de los elementos clave del diseño web centrado en el usuario es partir de tu público objetivo para diseñar la mejor web posible que satisfaga sus necesidades y complemente su proceso de interacción con la web de la mejor manera.
Un elemento de optimización en este punto es la forma en la que un usuario interactúa con la web. El bounce rate (tasa de rebote), el flujo de usuarios (User Flow) o la interacción con elementos “clickeables” de la web son factores que determinan el nivel de engagement (retención de audiencia).
La optimización UX/UI analiza todos los elementos correspondientes para brindar soluciones que mejoren la experiencia del usuario con la web, lo cual puede traducirse directamente en ventas. Es decir, esto permite: optimizar el flujo de usuarios para encontrar productos, optimizar el paso a paso del carrito de compras, o resaltar elementos relevantes para los usuarios.
Otro elemento de optimización en una web es la optimización SEO o Posicionamiento Web. Debido a que nuestro sitio web convive con miles de páginas web similares, es imperativo diferenciarnos y ser lo más relevantes posibles sobre el tema que tratamos y esto puede hacerse mediante el SEO.
Millones de personas utilizan Google todos los días para buscar páginas web, y la optimización SEO permite ajustar los elementos de un sitio web para que Google considere que este sitio tiene el contenido más relevante asociado a palabras clave, resultando en la muestra de la página en los primeros resultados del buscador.
Esta estrategia es importante, ya que en Google se realizan 5 billones de búsquedas diarias, y la mayoría de negocios ven este canal como el principal vehículo para generar ventas.
La optimización CRO o “Conversion Rate Optimization”, es la optimización de desempeño del sitio web para generar conversiones. Es decir, una vez que se ha diseñado la web y se ha logrado generar el tráfico suficiente mediante los distintos canales de adquisición como: Orgánico (SEO), Pagado, Social, Referido o Directo; es momento de optimizar la forma en la que generamos conversiones.
La optimización de la tasa de conversión busca hacer los ajustes necesarios en la web para poder persuadir a los usuarios a que cumplan con el objetivo concreto que tienes definido para la web.
Esta práctica es muy usada en páginas de destino (landing pages) o en páginas principales como el home (inicio). También es usada en campañas publicitarias como en el sitio web directamente.
Bajo es pensamiento de que "todo se puede mejorar", la optimización web se abre paso como uno de los servicios más especializados y diferenciados del mercado.”
Existen muchas herramientas que puedes utilizar para mejorar el desempeño de tu página web, entre ellas:
Una de las principales fuentes para determinar qué elementos se deben optimizar en una web se logra gracias a la analítica digital. Configurar los elementos que permiten recopilar esta información es clave para analizar los problemas existentes y para medir los efectos de las soluciones propuestas en el tiempo.
El uso de “mapas de calor” permite ver una capa superior de datos que la analítica tradicional no muestra, tal como como las zonas calientes y frias de la web: cuánto navegan los usuarios, a qué le hacen click y a qué no, etc. Permite idenficar elementos a mejorar contrastándolo con la Analítica digital.
La experiementación A/B o multi-variable puede ser efectuada al momento de proponer ajustes web y permite medir el desempeño del ajuste vs. la versión anterior o los elementos clave que deben cambiar en la web.
Pruebas que permiten comprender mejor el flujo de los usuarios en el sitio web y de cómo interactúan con él. Esto permite mejoras la experiencia del usuario en la página web. A veces creemos que los estándares de diseño son válidos pero para públicos determinados puede no ser la regla, los test de usabilidad nos brindan un gran aporte para identificar esos elementos.
A fin de cuentas, la optimización web no es más que la mejora constante de los distintos elementos de tu sitio web que te permiten generar ventas, vistas, registros, leads o cualquier objetivo de negocio que tenga. Es una práctica que tiene como base el análisis e interpretación de datos que permitan hacer ajustes a fin de mejorar la forma de otorgar resultados.
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